Hay cientos de miles de millones de tropecientillones de tipos diferentes de setas y hongos comestibles, incluídos los de los pies, los genitales y los alucinógenos, pero hemos decidido untilizar una seta de crianza normal y corriente, de las que vienen en cajas de plástico grandotas a las fruterías y verdulerías.
Eso sí, no nos hacemos responsables de lo que hagáis con los hongos de vuestros pies o los de debajo del sofá.
Pasamos sin más dilación a los ingredúbiris:
Les Ingrediónts:
- Setas.
- Huevo.
- Aceite.
- Sal.
- Garam Masala (una especia sustituíble por un poco de curry).
- Salsa de soja.
Elaboración:
- Buscamos con un perro sabueso la sartén
- Vertemos un poco de aceite (elemental, mi querido Huevatson).
- Salteamos las setas cortadas en cuadrados, triángulos, samuráis, tijeras, planchas de pelo, etc.
- Añadimos un par de cucharaditas de Garam Masala y volvemos a saltear.
- Mojamos con un chorro de salsa de soja (que no mojamos un churro en salsa de soja).
- Dejamos reducir un poco el caldurrio que ha resultado y añadimos el huevo batido (¡por fin!).
- Cuajamos por un lado, cuajamos por el otro, cuajamos por el tercero y finalmente le damos la vuelta para terminar de cuajarlo por su octavo y último vértice. Usar un buen fregadero con dos cañerías para voltear.
- Servimos en un plato y se lo damos de comer al mono del armario.
- Ver cómo le arden los ojos y empieza a hablar en una lengua extraña.
- Grabarlo y subirlo al yutuf.
- Esperar al exorcista.
En fin, damos paso a la fotogranflis:
Pues eso, que hasta aquí hemos llegado hoy.
Sabemos que la receta de hoy es un poco más elaborada que las demás, pero merece la pena ir subiendo la dificultad un poquitín.
¡Nos vemos en la próxima tortillasca!
Un abrazo enormísimo, tortillistas
Papá Tortilla